
La llamó cuando iba hacia Reynosa y nunca volvió a saber nada de él
Tegucigalpa, MDC. Una acongojada madre hondureña, con gran tristeza, recuerda que en una fecha como hoy, once de marzo se cumplen nueve años del desaparecimiento de su hijo Marco Antonio amador, en el trayecto a los Estados Unidos de Norte América.
La señora Mary Castro, con lágrimas en sus ojos y su voz entrecortada, relata que desde el año 2013 que recibió una llamada de su hijo informándole que estaba en tránsito de Nuevo Laredo a Reynosa, México, nunca más volvió a saber nada de él.
Castro, manifiesta que al igual que su hijo, muchos hondureños emigran por la difícil situación del país, “Aquí en Honduras no hay empleos y cada día todo está más caro y que sobre todo la gran mayoría de las personas que emigran, lo hacen huyendo de la violencia”, lamentó.
A pesar que han pasado nueve años, doña Mary dice que no pierde la esperanza y tiene la fe que con el nuevo gobierno, se abrirán nuevas oportunidades y rutas de búsqueda de los hondureños desaparecidos hasta la fecha, en el trayecto hacia los Estados Unidos.

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